Como recordaran Erika, es la chubby que se encarga de la limpieza en la oficina. Hasta el día de hoy tenemos sexo ocasionalmente en la oficina, en hoteles o donde el cuerpo lo pida. Pero el siguiente relato sucedió el día de su cumpleaños. Y todo sucedió así…

Llegado el día de la celebración, hice lo posible por terminar rápido y temprano todos los pendientes del día, pero me fue imposible cumplirlo; por lo cual llegue muy tarde a la fiesta de cumpleaños.

Erika, se notaba molesta y era lógico por lo que le prometí que la compensaría al día siguiente llevándola de paseo a donde ella quisiera.

    En serio, pero no voy sola hee!!…-respondió sonriente-
    Lo sé no hay problema, ya otro día te doy tu regalote –dije mientras me tomaba el pene-
    Jajajaja, mejor me los das mañana en una escapada…-respondió sonrojándose-

Es noche término con pastel y algunas cervezas. A la mañana siguiente pase por ella a eso de las 9:00 a.m., he de mencionar que debido a sus problemas económicos Erika vivía con su madre mientras se nivelaban las cosas, su hija Joselyn salió por la ventana y minutos después toda la familia salía por la puerta, por familia me refiero a: Esther (Mama), Erika, Joselyn (Hija), Zaira (Hermana) y Manuel (Novio de Zaira).

Por suerte el novio de Zaira llevaba un auto, así que Erika, Esther y Joselyn subieron a mi auto. Una vez estando dentro; pregunte.

    Y bien adonde?…
    Pues mira amigo como me tienes que consentir hoy… decidí que quiero ir a las truchas…-respondió Erika-
    Ok… las truchas serán…-respondí-

Tome camino hacia el pueblo de Malinalco Estado de México,  durante el trayecto la plática fluía con naturalidad entre las tres mujeres y yo. Por conversaciones con algunos amigos del vecindario yo sabía que la señora Esther, era toda una putilla. Que le encantaba el pene y el sexo oral era su especialidad, las ideas sucias pasaban por mi mente cada vez que la miraba por el espejo retrovisor.

Doña Esther es una mujer chaparrita, se apenas 1.45 de estatura, complexión mediana, cara redonda, cabello corto y crespo, ojos algo rasgados, boca y nariz pequeña, senos pequeños, caderas grandes, nalgas abultadas y piernas cortas pero muy buenas. Caso contrario a su hija la cual recordarán es una mujer grande con senos enormes y muy rellenita, aunque muy parecida a su mama físicamente.

La idea de hacer un trio con las dos mujeres no dejaba de retumbar en mi cabeza, así que me di a la tarea de medir el terreno y ver si existía la posibilidad del mismo. Al llegar a nuestro destino paseamos un poco por el pueblo, compramos helado, y comimos trucha como lo había pedido Erika.

Casi para regresar Erika y su mama pidieron ir a un bar a tomar una cerveza, por lo que pregunte si no existía problema por Joselyn, ya que no sabia que edad tenia, ese dia me entere que aquella niña ya no era tan niña; tenía 18 años cumplidos. Así que acepte y nos dirigimos a un bar local a beber una cerveza. La estancia en el establecimiento se prolongó por espacio de dos horas, tiempo en el cual Erika y Esther se empujaron 6 cervezas cada quien, Joselyn y yo solo una. Una vez que salimos de ahí emprendimos el regreso, Esther y Erika se notaban algo pasadas de tragos, mientras que Joselyn, se acurruco en el asiento trasero y se durmió profundamente.

Estando en el camino de regreso a casa, note que Erika miraba a su madre n repetidas ocaciones y sonreía pícaramente, lo cual atribuí a las 6 cervezas que traían encima. Después de unos risas mas Erika se acomodó de lado en el asiento del copiloto y mirando a su mama dijo.

    Quieres ver lo que te conté?…
    Pues si… y no solo ver…-respondió Esther con su voz aguardentosa-

Mire a Erika extrañado y consiente de que aquellas mujeres están calientes, mi corazón latia muy rápido ya que durante todo el día había fantaseado con montar un buen trio con aquellas mujeres, mientras les miraba el trasero y las tetas.

    Me das mi regalo… amigo?…-pregunto Erika, mientras su mano se posaba en mi entre pierna-
    Aquí…? No hay pedo por tu mama?….-dije mirando a Esther por el espejo-
    No… verdad ma… que no hay pedo…?-dijo Erika mirando a Esther-
    No mi hijo… dáselo por mí ni te preocupes… y por esta niña menos esta pedida-dijo Esther refiriéndose a Joselyn quien dormía profundamente-

Me encogí de hombros y respondí.

    Pues ya sabes dónde está tu regalo mamasota…

Sin más que decir Erika se recostó sobre el asiento y con gran pericia me abrió la cremallera y abrió mi bóxer, dejando salir a mi amigo e cabezón.

    Hazte para acá… para que veas bien…-dijo Erika a Esther-

Esther se inclinó un poco hacia delante y respondió.

    Mmm que bonita verga papi…

Al mismo tiempo en que Erika pasaba su lengua por todo el largo de mi pene aun flácido.

    Y espérate deja que se ponga dura y veras… -dijo Erika-
    Si me imagino… si así ya se ve rica… mmm!!… quiero probarla… me dejan?-respondió Esther-
    Pues entonces vamos a dejar a Joselyn… y vamos a un hotel…-dijo Erika-
    Como quieran ustedes mandan…-respondí-

Erika me dio un beso tronado en el glande y volvió a meter mi pene en mis pantalones, pero sin dejar de masturbarme por encima del pantalón. La fantasía que había imaginado todo el día estaba a punto de realizarse. En menos del tiempo y llendo a toda marcha regrese a la casa de Esther, al estacionar afuera Esther sacudió a Joselyn para despertarla, bjandola del auto , Erika bajo y le dio un beso en la mejilla, volviendo a entrar al auto; seguida de su mama. Por lo que Joselyn molesta dijo en voz alta.

    Aaa!!… a donde van… porque no me llevan?…
    Jaja… no amor no puedes ir a donde vamos….-respondió Erika-
    Mmm!!… ya se van de putas…-dijo molesta mientras entraba a casa-
    Como vez a esta niña…?-dijo Esther-
    Pss ya nos conoce, jajajajajajaja -respondió Erika-
    Como que ya las conoce?-pregunte-
    Pues es que una vez nos sorprendió cogiéndonos a un cabron amigo de mi marido –dijo Esther-

Aquello me dejo sin palabras, y lo que dijeron después más…

    Pero si quieres la llevamos he… -dijo Esther-
    Jajajajajaja, ya se espantó… mama….-dijo Erika mirándome extrañado-
    Jajajaja, como quieran ya saben que por mí no hay pedo… ya alcanza el timbre así que por mí no se preocupen…-respondí muy excitado-
    Na, cabron… el culito de mi nena es virgencito… y con esa vergota la destrozas… mejor que le den una verga más chica y después vemos…-respondió Erika con voz firme-

Las risas comenzaron al mismo tiempo que arranque el auto dirigiéndome a un hotel. Minutos después llegamos a un hotel en las afueras de la ciudad, nos asignaron una habitación y entramos los tres en ella.

    Muy bien chicas, que quieren hacer primero?…-pregunte, frotándome las manos-
    Chicas?… no mames, amigo… trátanos como perras… nos gusta más…-dijo Erika-
    Aaa!!… así que no es la primera vez que comparten verga… cabronas?…-respondí-
    Jajajajaja, no amigo… mi mama también le probo la verga a Toño… y hemos compartido a varios weyes…-respondió Erika mientras Esther reía-
    Ok… entonces a darle putitas… encuérense… que les voy a dar por todos lados…-dije con voz firme-

Las dos se comenzaron a desnudar y las diferencias eran notables, Erika con su cuerpo voluptuoso y lleno de carne, mientras que Esther era más delgada y con menos atributos en el pecho; al tiempo que yo también me desnudaba. Una vez que los tres estuvimos completamente desnudos, dije.

    Ahora sí, perras… a mamar verga…

Me coloque en medio de ellas y la diferencia de estatura era mucha ya que sus caras quedaban justo en mi abdomen superior, así que las tome por la cabeza y suavemente las puse de rodillas ordenándoles que me dieran sexo oral al mismo tiempo.

Esther sin perder tiempo se tragó mi pene aun flácido, y comenzó a darme un buen sexo oral, mientras que Erika acariciaba mis testículos, de pronto Esther saco mi pene de su boca dejando un beso tronado sobre mi glande y se lo ofreció a su hija; misma que lo lamio y se lo trago para comenzar a ponerlo a punto.

Unos segundos después mi pene estaba completamente duro y listo para la acción, las dos bocas recorrían lo largo de mi pene erecto, provocando un gran placer, mientras que mis manos las tomaban por los cabellos.

    Uy!!… si que esta vergon este cabron…-exclamo Esther-
    Te dije, mama… y espérate a que te la meta… lo vas a gozar…-respondió Erika-
    A callar putas… y mamen más…- dije jalándolas por lo cabellos-

Las dos siguieron dándome sexo oral por varios minutos, sus bocas, lenguas y labios chupaban, lamian y se paseaban por todo mi falo y testículos. Así siguieron pasando los minutos, en un momento mis manos tomaron la cabeza de Esther y dije.

    Abre la boca perra sucia… te vas a tragar toda mi verga, sin protestar…

Esther abrió la boca y saco la lengua, mi pene se hundió hasta que sus labios tocaron mi pubis. Provocando el clásico sonido de asfixia y vomito.

    Uuugguuaaaa!!… –se escuchó mientras las manos de Esther golpeaban mis muslos-
    Aaa!!… que bien mamas zorrita…-dije mientras retiraba mi pene de su boca-

Esther, respiro profundamente y miro a Erika.

    Tu turno gordis… abre la boca, vamos a ver quién traga más verga…-dije poniendo mi pene sobre sus labios-

Erika hizo lo que le pedí y lentamente se tragó mi pene hasta que sus labios volvieron a tocar mi pubis.

    Uuuuggguuuaaaa!!… pa la madre….-exclamo Erika-
    Muy bien perritas sucias, van empatadas…-dije mientras frotaba mi pene en las tetas de Erika-
    Vamos por el desempate….-dije volviendo a meterle el pene en la boca a Esther-

Así estuve por varios minutos, los ojos de las dos mujeres se notaban llorosos y de mapache debido a que la máscara de pestañas se había corrido por completo. Mi perversión y calentura aumentaban con cada penetración que les daba en la boca. Mis manos apretaban los senos de cada una al mismo tiempo que le hundía todo el pene en la boca.

    Ya basta de mamar… vamos a coger zorras… quien va a ser la primera?…-pregunte-

Las dos se miraron por un segundo y Erika dijo.

    Mi mama, amigo… ella no te ha tenido dentro…. Vas ma… saborea esa verga en la panocha…

Esther me miro y tomándola por los cabellos la puse de pie, preguntándole.

    Como te gusta mama zorra?…
    Me gusta fuerte y sucio… -respondió-
    Muy bien…. Y por el culo también?….-pregunte de nuevo-
    Jaja, mi mama es virgen del culo amigo… nadie se lo ha abierto aun…-respondió Erika-
    Aaa!!… vaya, vaya… así que virgen del culo… Tendremos que estrenarlo o no?…. zorra?…-dije mientras apretaba los senos de Esther-
    Noo!!… mi culo no… por favor… -respondió suplicante-
    Ok, ok, ya veremos… por lo menos te meto los dedos… mama zorra…-exclame-
    Ahora gordis, ponte boca arriba y abre las piernas… y tu mama zorra, le vas a mamar la crepa a tu nena mientras te cojo…-dije con voz firme-

Erika, se colocó como le pedí sobre la cama, mientras que Esther; se posiciono de perrito sobre la vagina de Erika, y dijo.

    Méteme la verga, papa… dame esa verga en mi panocha…

Me coloque detrás de ella y la penetre suavemente, la vieja estaba empapada y caliente, al sentir mi pene por completo dentro de su vagina; Esther gimió suave y dijo.

    Papa, que rico esta ese pito… muy duro y gordo como me gusta aaa!!… dame, dame fuerte…
    Uyy!!… mamita zorra, estas empapada… y caliente putita… te voy a gozar bien chingon…-respondí-

Comencé a penetrarla despacio disfrutando cada centímetro que se hundía en su vagina húmeda e hirviente. Muy lentamente fui subiendo la intensidad de las penetraciones con lo que el clásico sonido de golpeteo de sus buenas nalgas con mi pubis comenzó a escucharse, mientras que sus gemidos y palabras subían de tono; al igual que las de Erika quién solo se masturbaba y miraba la cara de placer de su mama.

    Pap, pap, pap, pap, pap, pap, pap, ha, ha, ha, ha, ha, ha, cógeme, cógeme más fuerte… así, así papi… uy, uy, uy, pap, pap, pap, pap, pap, pap, pap, pap, pap, pap, pap, pap, hay dios, dios… que rica verga… -gemía y decía Esther-
    Mami, te están cogiendo bien?… te gusta la verga de este cabron… verdad… así cógetela duro papi… dale fuerte a mi mami putita… te encanta la verga verdad?… di que te encanta la verga…-decía Erika-
    Si me encanta la verga, me gusta la verga… quiero más verga…-respondía Esther-
    Pap, pap, pap, pap, pap, pap, pap, pap, pap, pap, pap, pap, que rica panochita, mami… que rica esta tu colita… mojadita y calientita… mmm!!… –dije lleno de placer-
    Chúpale la pepita a tu nena, mami putita… chúpasela… saboréale la cerpa a tu nena… -dije tomando los cabellos de Esther-

Ella comenzó a darle sexo oral a Erika y todos disfrutábamos del placer que había en aquella habitación de hotel. En el momento en que Esther se perdió producto del placer, humedecí dos dedos de mi mano derecha y de un solo golpe los clave en su ano.

    Aaayyy!!… wey… duele cabron… despacito… no mames… vas a hacer que me cague…-grito Esther al sentir mis dedos dentro de su agujerito-
    Ya, ya, calma… respira y disfruta, zorrita canosa… aquí los voy a dejar un rato para que se vaya abriendo tu culo, ok?…-respondí-
    Aja, aja… cógeme la pucha cabron… dame duro hazme gritar con ese pedazo de verga que te cargas…-dijo Esther-
    Chúpame las chichis mami… y méteme los dedos en la coneja… mientras este cabron te coge duro…-pidió Erika-

Seguí penetrando a Esther mientras ella complacía a su hija con sus peticiones, mis dedos aun inmóviles dentro de su pequeño y apretado estaba ansiosos por moverse, ensanchando su pequeño agujero. El clímax de Esther estaba por llegar y aprovechando ese momento comencé a meter y sacar despacio los dedos de su culo.

    Uy, dios, uy dios…. Que rico ya no duele tanto… mmm!!… me vengo papi, me vengo… cuando te diga me sacas la verga, pero no los dedos… déjame disfrutar de mi orgasmo…-dijo Esther-

Bastaron unas cuantas bombeadas más para que con un grito de “ya” Esther llegara a su orgasmo. No hubo chorro de líquido ni nada parecido, más bien su cuerpo se contrajo para después temblar como gelatina por espacio de unos minutos.

    Uy mami, que rico te viniste… me toca… papi… dame verga… si?…-dijo Erika mientras abrazaba a su madre-
    Ya estas gordis, vas tu… pero le vamos a enseñar a tu mami zorra como se coge un culo de a deberás… ok?…-respondí-
    Mmm!!… si dame por el culito… hasta que me hagas venirme…-exclamo Erika-

Una vez que Esther dejo de tener los remanentes del orgasmo, le pedí que se bajara de encima de su hija, pegándole en las nalgas. Ella se tendió a un costado de Erika y dijo.

    Uyy… que rico la estamos pasando… nunca me imaginé que este flaquito tuviera semejante vergon…
    Mira zorrita como le voy a reventar el culo a tu nena… -dije para llamar su atención-

De inmediato Esther se puso de rodillas junto a las piernas de Erika, las cuales se elevaban sostenidas por mis manos, ella misma tomo mi pene y lo coloco encima de su ano, diciendo.

    Empuja papi… despacito y después me das duro como siempre…

Esther no perdía detalle alguno, comencé a empujar y mi glande se hundió de apoco dentro del ano de Erika, lo que provoco un gemido de dolor y placer; al tiempo que Esther exclamo.

    Uuummmm!!… papi… así…. Hay wey… te esta entrando rico Eri?… aja… pueba mama se siente bien chingon… si no agunatas pues te la saca y ya… nos se me da miedo… pero dale para ver como la gozas y veo si me animo…

Muy lentamente le hundi todo mi pene en el culo a Erika, dejando inmóvil por unos segundos para dilatar un poco su agujero. Ella se frotaba los senos y Esther le maturbaba el clítoris.

    Uy, cabron… que rico… asi papi… que rico, que rico se siente… nunca te mueras cabron… que rica verga me cae que si esta bien rica… -decia Erika-

Su ano comenzó a dilatarse y las penetraciones comenzaron a ser mas constantes y cadenciosas, Esther miraba como mi pene se clavaba en el culo de su hija y por momentos me miraba fijamente apreciando todo el placer que el culo de Erika me brindaba.

    Aprieta chingon, papi?…-pregunto Esther-
    Aja… bien chingon… lo doble que la panocha…-respondí-
    Y yo siento el doble de placer… que si me estuviera cogiendo por la coneja, mami… aaaa!!…-decía Erika-

En unos instantes las penetraciones se tornaron violentas, los gritos y gemidos de los tres se hacían unísonos.

    Uy, uy, uy, uy, aaa, aa, aa, aa, aa, aa, aa, aa, aa, si, si, si, si, si, cógeme, cógeme, mm, mm, mm, mm, mm, mm, hu, hu, hu, hu, hu, hu…
    Uy… gordis aprieta las nalgas para que me ahorques la verga…-decía mientras miraba como sus senos bailaban al ritmo de las penetraciones que le daba-

Erika apretaba el culo cada vez que mi pene intentaba salir de él, lo que provocaba un placer enorme, la cara de ambos era de placer puro, por lo que Esther se puso de pie; montándose encima de su hija y dijo.

    Méteme los dedos en el culo amor… ábreme mas el culo… ya me anime a tener ese pito dentro de mi culito…

Erika se humedeció los dedos y despacio los introdujo en el ano de Esther, muy lentamente comenzó el clásico mete saca; con lo que Esther gemía  junto con nosotros, unos minutos después Erika apretó el culo y dijo.

    No te muevas papi… me voy a venir…

Me quede inmóvil por un instante y mire como se derramaron sus líquidos femeninos sobre mi pene aun clavado en su ano. Esther sin perder tiempo lamio la vagina de su hija y la limpio, seguí cogiéndome a Erika por unos minutos más, hasta que ella misma me pidió que le sacara el pene.

    Ya papi, sácamelo… aunque yo soy la festejada; quiero que te cojas a mi mama y le des verga en ese culito virgen…

Saque mi pene del culo de Erika y me dirigí rápidamente a lavarme el miembro, después que estuvo reluciente le pedí que me diera un poco de sexo oral a Erika, mientras que Esther se notaba nerviosa. Unos minutos bastaron para que mi miembro estuviera listo de nuevo.

    Muy bien mama zorrita, lista?…-pregunte-
    Aja… y no puedo correr… verdad…. A darle pss que chinga…-dijo Esther mientras se tomaba los senos-
    Como la quieres, así como a Erika, de perrito, de lado… o te quieres sentar en mi verga para que tu sola te la claves?….-pregunte de nuevo-
    Como me dolerá menos nena?…-pregunto Esther a Erika-
    Pues como te guste más… ma…-respondió-
    Bueno ya… vamos de ladito… a ver si aguanto…-dijo Esther y se colocó de lado separándose las nalgas con la mano-

Colocándome frente a su ano, deje que su culo sientiera mi pene aplicándole un poco de presión sobre el.

    Uyy!!… despacito papi… has que quiera mas no que ya no quiera…-dijo al sentir mi pene sobre su ano-
    Ssshh! respira mami… relájate… trata de disfrutarlo…-respondí-

Erika tomo a su madre de una nalga y la abrió aún más para dejarme ver perfectamente su negro ano, comencé a empujar de apoco y en un momento mi glande se hundió en el culo de Esther.

    Uyyy!!!… dios…. Espérate… duele… uuuyyy!!…-grito Esther-

Me quede ahí sin moverme esperando a que su culo se amoldara a mi pene. Aquel agujero era muy apretado y ardiente, sabía que lo iba a disfrutar al máximo. Muy lentamente mi pene se hundió hasta la mitad y Esther volvió a decir.

    Hay, hay… espérate… despacito… duele, duele…

Erika la tomo de las manos y dijo.

    Relaja el culo, mami… así te dolerá menos…

Después de unos minutos volví a empujar y finalmente mi pene se perdió dentro del culo de Esther.

    Uy, papi…. Mmmm!!… siento hervir mi culo… mmm!!… que rico…. Ya va doliendo menos… espérate un poquito…-dijo Esther, mientras me acariciaba una nalga-

Espere por espacio de unos dos minutos y suavemente saque la mitad de mi pene de su culo, para volver a meterlo hasta el fondo despacio.

    Diosss!!…. diossss!!… no puedo creer cuanto tarde en probar esto…. Mmm!!… que rico dame despacito papito…-dijo Esther comenzando a disfrutar de las penetraciones-
    Uyy!!… mami cerda… estas que ardes…. Aprietas como quinceañera…-dije al sentir el calor de su culo-

Mi pene se hundía con mayor facilidad con el pasar de los minutos, así que Erika dejo de alar la nalga de su madre y se puso de rodillas a un lado de ella; dándome uno de sus senos para chupar su pezón, al tiempo que Esther gemía de placer y decía.

    Así, así, papi… cógeme… mm, mm, mm, mm, mm, mm, mm, um, um, um, um, um, dale, dale… reviéntame el culito… reviéntamelo como a Eri….

Esa fue la señal para comenzar a darle fuerte por el culo, el calor y lo apretado del mismo me hizo saber de inmediato que no tardaría mucho para dejar salir mis renacuajos. Pero mientras eso pasaba lo disfrutaría, cuanto pudiera.

    Zorrita cerda… estas bien rica… que rico culo tienes mami… uyy!!… me encanta lo caliente que estas…-decía mientras disfrutaba el ano de Esther-
    Aja, te gusta papito… uy, uy, así… ahí… ahí… no pares… dame verga en el culito… que rico… que rico…-decía Esther-
    Te dije mami, que te iba a encantar la verga por el culo… jeje… dale papi… dale a eso culito apretado de mami… mmm que rico… chúpame las chichis papi… -gemía y decía Erika-
    Pap, pap, pap, pap, pap, pap, pap, pap, pap, pap, pap, pap, uy, uy, uy, uy, aaa, aa, aa, aa, aa, aa, aa, aa, aa, si, si, si, si, si, cógeme, cógeme, mm, mm, mm, mm, mm, mm, hu, hu, hu, hu, hu, hu…

Mi pene comenzó a lanzar alertas de inundación así que entre gemidos dije.

    Donde quieren los mocos, putitas?….
    Dáselos a Eri… es la del cumpleaños…-respondió Esther-
    Muy bien Gordis ponte lista porque ya quiere salir tu regalo…-exclame-

Erika se colocó su cabeza sobre la nalga de su madre y abrió la boca sacando la lengua.

    Dame mocos… papi… dame tus mocos… mmm!!… ya… dámelos…-gemía Erika mientras se masturbaba con la mano-

Seguí bombeándome a Esther por unos minutos más, sintiendo que mi pene no aguataba más, lo saque de golpe del culo de Esther y apenas tuve tiempo de acercarlo a la boca aún abierta de Erika; para dejar salir la carga de esperma.

    Uuumm!!… gordis… feliz cumpleaños…. Uuuummm!!…-dije mientras vertía mi semen en su boca-
    Uy que rico… si, déjale todos tus mocos en la boca, papi… mmm que rico…-decía entre gemidos Esther, sin perder detalle de como mi semen salpicaba la boca, labios y cara de su hija-

Erika tragaba el semen que caía en su boca y lamia sus labios recogiendo el poco que quedo sobre ellos, yo sacudía mi pene en su cara para dejarle hasta la última gota de semen sobre ella. Deje de estremecerme y soltar descargas de semen, abrí los ojos y mire como Esther quien se había incorporado y puesto de rodillas junto a su hija, lamia mi pene dejándolo limpio.

    Huy… papi… que rico regalo de cumpleaños me diste… -exclamo Erika-
    Aja… que rico la pasamos… pero niños es hora de irnos porque mi marido no tarda en llegar a la casa y tengo que darle su cena….-dijo Esther dando a entender que cogería con su marido también-

Todos nos tumbamos en la cama y descansamos unos minutos, para después vestirnos y regresar a casa….

Y así fue como cumplí mi fantasía de hacer un trio con madre e hija….